Homo Nesher Ramla, el nuevo hallazgo que puede redefinir la evolución
Dos estudios publicados en la revista Science y liderados por Israel Heshkovitz y Yossi Zaidner junto a otros investigadores de la Universidad de Tel Aviv y de la Universidad Hebrea de Jerusalén, en los que han participado paleontólogos españoles del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana (CENIEH) de Burgos, documentan los fósiles encontrados y las herramientas que se encontraban junto a estos en el yacimiento de Nesher Ramla en Israel, zona que hasta ahora se creía que solo había sido habitada por sapiens y neandertales.
El análisis de los restos fósiles de un fragmento de hueso parietal de cráneo y una mandíbula casi completa de hace unos 130.000 años desvelan que se trata de un homínido arcaico con rasgos neandertales en la dentición y mandíbula (sin barbilla y con dientes de gran tamaño) y características que lo asemejan a Homo erectus en el cráneo, por lo que han llegado a la conclusión de que se trataría una población del Pleistoceno Medio identificada por primera vez. Se trataría de una población descendiente de otra que ya habitaba el Medio Oriente hace unos 400.000 años y podría ser la población de la que evolucionaron los neandertales y otros grupos humanos asiáticos. Por lo tanto, este descubrimiento cuestiona la hipótesis de que los neandertales se originaron en Europa y sugiere que al menos algunos de sus antepasados proceden de Levante.
Por tanto, los investigadores concluyen que se trataría de una población fuente de la que se desarrollaron la mayoría de humanos del Pleistoceno Medio y sugieren que se trataría de la población que se apareó con Homo sapiens al llegar estos a la región hace unos 200.000 años. Lo que supondría como sugieren los investigadores que esta población sería el nexo entre Europa y Asia. Y así, se reforzaría la idea de que gran parte del origen de las poblaciones europeas y asiáticas no se encontraría en África, sino en Asia y más concretamente en Oriente Próximo como comenta Bermúdez de Castro a TVE. De este modo, los investigadores aseguran que los fósiles de lugares como Skuhl y Qafzeh no pertenecerían a Homo sapiens arcaicos, sino a un linaje mixto entre Homo sapiens y el homo de Nesher Ramla.
En cuanto a las herramientas encontradas en el yacimiento, se observa una técnica de elaboración muy avanzada, lo que sugiere que además de intercambio genético hubo intercambio cultural entre este homo, los sapiens y los neandertales. De este modo, la interacción entre especies se refuerza.
Este descubrimiento puede cambiar el mapa evolutivo que se tenía hasta el momento y puede situar a Oriente Próximo como el epicentro de la evolución humana. Así, este descubrimiento se presenta como un importantísimo hallazgo para la ciencia que permite dar un nuevo sentido a fósiles anteriormente encontrados y añade otra pieza más al ya complejo estudio de la evolución humana.

Enlaces de interés:
- I. Hershkovitz et al. (2021) A Middle Pleistocene Homo from Nesher Ramla, Israel.
- Y. Zaidner et al. (2021) Middle Pleistocene Homo behavior and culture at 140,000 to 120,000 years ago and interactions with Homo sapiens.